La industria del arándano continúa con su gran dinamismo conquistando nuevos espacios. Este año, el hemisferio Sur exportó 400.000 toneladas, duplicando sus envíos en solo cuatro años.

Perú ha sido el gran ganador austral, ya que en la campaña que acaba de finalizar aportó el 72% de las exportaciones del hemisferio Sur, superando las 280.0000 toneladas (tn). Atrás quedó Chile con casi 90.000 tns; Sudáfrica con 21.000 tons; y aún menos Argentina-Uruguay con 4.500 tons.

“En este camino del éxito la campaña presentó puntos positivos, pero también se acentuaron tendencias menos favorables, así como hechos inesperados que obligarán a replantear las estrategias”, manifestó Betina Ernst de Topinfo.

Arándanos, citrus y construcción, los sectores que incluiría el plan "Puente Empleo"

Todos los mercados del Norte han incrementado sus compras. Por ello, en ningún caso se llegó a una saturación de las plazas. Grandes consumidores, como los norteamericanos, a los que se sumaron en los últimos años los europeos, han continuado incrementando año tras año sus importaciones.

Los tres principales destinos; EEUU, Europa y el Lejano Oriente han duplicado sus importaciones australes en apenas cuatro años.

Este crecimiento se logró gracias a la conquista de nuevos consumidores, así como al aumento de las compras de los consumidores habituales. Los menores precios minoristas, las atractivas ofertas, incluso, el uso de envases más grandes, lograron dinamizar las ventas.

Se amplió el comercio en mercados no tradicionales. Tal es el caso de algunos países en el Lejano Oriente (Corea del Sur o Taiwán), sudeste asiático (Tailandia y Singapur), el Medio Oriente y en Latinoamérica (Brasil y Colombia).

Este año se logró superar los problemas logísticos, como falta de espacio, retrasos en los envíos y complicaciones en los puertos que afectaron seriamente a la campaña anterior. Esto se consiguió gracias a una colaboración entre la industria arandanera, el gobierno y los responsables de la parte logística.

El mercado de los arándanos muestra un cambio, tanto para vendedores como para compradores

El mercado se volcó al envase grande. Los más comunes son los de 300 g, 6 oz o 1 pt. Por otro lado, el de 400-500g, que antes se ofrecía ocasionalmente, empezó a estar presente durante casi toda la campaña. El de 125 g entra cada vez más en desuso: solo a principio o final de campaña y para el orgánico.

La producción orgánica se amplió. Durante toda la campaña se la ofreció junto con la convencional y se incrementaron marcadamente la cantidad de promociones realizadas.

El creciente éxito del arándano conlleva beneficios, pero también serios desafíos

El cambio varietal se hizo notar. En las exportaciones de los países australes empezaron a prevalecer las variedades nuevas. Mejor calidad y condición: todos los proveedores continúan apostando fuertemente a este punto, sea con nuevas variedades, mejoras en la producción y logística.

Sombras de la producción

- Cambio climático: extremos de temperaturas, secas, lluvias inesperadas, entre otros fenómenos, ya son la norma. Este año, Chile sufrió varias olas de calor extremo, lo que redujo el rendimiento y calidad de los arándanos cosechados. La campaña finalizó anticipadamente dado que los frutos ya no presentaban calidad exportable. En Sudáfrica, la cosecha se alteró por lluvias inesperadas. En Perú, una primavera con temperaturas cambiantes y mayores humedades relativas complicaron la sanidad de los cultivos.

- Revueltas sociales: afectaron principalmente a Perú, lo que complicó la cosecha e interrumpió el traslado de la fruta a los puertos.

- Bajos precios de venta: la creciente competencia entre los oferentes y la presión ejercida por los compradores, en especial, las grandes cadenas, llevó a que los precios decaigan aún más. Hubo semanas con “precios ridículos”, imposibles para mantener un negocio.

- Caída de la rentabilidad: todos los proveedores sufrieron la menor rentabilidad ante los bajos precios que se manejaron. Esto ya se había observado en la temporada anterior. Los bajos valores están poniendo en riesgo el desarrollo de este negocio, al complicar la inversión en mejoras tecnológicas y varietales.

- Freno a las inversiones: la caída de la rentabilidad provocó que se frene el boom de las plantaciones nuevas. Incluso, en Perú, donde hasta ahora el arándano es el gran éxito, se suspendieron nuevos proyectos y se avanzó con cautela. El esfuerzo se centró en el recambio varietal y mejorar la productividad de los cultivos.

- Menor ventaja del orgánico: fue el segmento que más sufrió la caída de los precios. La mayor oferta, insuficiente mercado y calidades no siempre óptimas, llevaron a que se reduzca drásticamente el plus de precios que había obtenido el orgánico. Este año fue común ver ofertas de arándano orgánico al mismo precio que el convencional. Esto llevó a un replanteo de las producciones, ante los mayores costos y dedicación que tienen las frutas orgánicas.